EL VOCERO ISLEÑO
Llegan
otra vez las fiestas de Navidad y el Fin
de Año y continuamos con ustedes y gracias a ustedes. Acompañarlos en estos
últimos tiempos no fue, ni es fácil pero
vale el esfuerzo y mantener esta complicidad en la información del informante y
el informado. Es tiempo de un balance y repaso de las cosas que sucedieron y no vamos a dejar de hacerlo. Para la mayoría seguramente no fue uno de los
mejores años, pero si tuvimos la suerte o fuimos señalados para que nuestra salud y la de nuestros seres
queridos nos acompañen, que no es poco, debemos ser agradecidos. Tuvimos un comienzo
de año demasiado complicado para quienes gozamos de vivir en estas islas,
aunque sabemos que cada tanto, este
lugar de la naturaleza, nos pasa factura por los ataques que muchos le
perpetran. Nos demostró esta etapa que la solidaridad es inmensa en el pueblo
argentino y lo sentimos como pocas veces en este año. También se dejó ver el
oportunismo de muchos aprovechándose de
estas situaciones dejando al descubierto su mezquindad, gracias a dios, son los
menos. El cambio generado este año en las interrelaciones comunitarias
fue uno de los hechos más relevantes y llevado a cabo por sus propios actores.
Ávidos de volver a algo que se venía perdiendo durante décadas, como fue la comunicación, hoy y en este
último año se fue volviendo a recuperar, con un gran esfuerzo. Toda transición es lenta, más si se piensa mantenerla
en el tiempo, no podemos construirla sin bases sólidas sustentadas en la
esperanza que hoy es el motor de muchos. Este Vocero Isleño acompaña el cambio
en todas sus formas, siempre que este guiado en pos de la prosperidad y el
crecimiento de la comunidad, no solo en lo económico sino en valores y
principio, con aciertos y errores, que
reconocidos y subsanados nos permite crecer y evitar volver a cometerlos. En lo personal quiero hacer llegar el
agradecimiento a todos los que me acompañaron y me acompañan en este pequeño
emprendimiento que día a día me permite crecer y relacionarme con todos
ustedes, base del ser y del poder hacer. Felicidades en estas fiestas para todos y que la salud y la prosperidad se derrame en ustedes y en sus seres amados. Dios bendiga sus hogares.
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