lunes, 28 de marzo de 2016

Por qué los jubilados docentes ganan cada vez menos

Por qué los jubilados docentes ganan cada vez menos
Las cuentas están dadas así: en marzo de 2015, el Fondo Nacional de Incentivo Docente (Fonid), un adicional que se incorpora al salario de los maestros, que financia el Gobierno federal en negro y que no llega, por eso mismo, a los jubilados, representaba una suma fija de $255. Esa cifra, sobre un salario mínimo para el cargo testigo, el maestro de grado sin antigüedad, de $6.550, representaba el 3,89%. Un año después, en marzo de 2016, el mínimo garantizado de bolsillo está en $6.805, y el Incentivo, en $510 por cargo, con lo cual la incidencia de ese monto en negro trepa ahora al 7,49%. Pero si se aplica finalmente la propuesta de incremento salarial ofrecida por la administración del gobernador Gustavo Bordet para el primer semestre del año, un 37% entre febrero y julio, el mínimo garantizado de bolsillo para los maestros trepará a $9.329, y el Fonid, será, en agosto próximo, de una cifra de $1.210.
Así, la incidencia de ese adicional en negro habrá crecido otra vez en el salario de los maestros, y representará un 12,49%.
O sea, en poco más de un año, se habrá cuadruplicado la incidencia del salario en negro entre los maestros.
La incorporación de un adicional en negro sobre el sueldo de los maestros en actividad repercute negativamente sobre el intereso de un docente jubilado, que deja entonces de percibir el 82% de lo que cobra un docente en función. Desde la Agrupación Rojo y Negro de la Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (Agmer), gremio que ya rechazó las cuatro últimas ofertas salariales de la administración Bordet, sostienen que la pérdida del salario del jubilado se irá profundizando con el incremento de ese adicional en negro.
El Incentivo Docente surgió luego de la protesta docente de 1998, después de la emblemática Carpa Blanca que los maestros sostuvieron durante 1.003 días frente al Congreso.
Aunque Agmer batalló en la Justicia en procura de lograr su blanqueo, el Gobierno ha rechazado esa posibilidad, y deja la definición en torno al blanqueo del Fonid en manos del Ministerio de Educación de la Nación, responsable de su pago. Así lo dejó planteado ahora, en la discusión paritaria que se desarrolla en el despacho de la jueza laboral María Alejandra Abud, quien el 1º del actual dictó la conciliación obligatoria tras el fracaso de la negociación salarial.
La Agrupación Rojo y Negro dice que en la propuesta salarial que elaboró el Gobierno la incidencia del Fondo de Incentivo, en negro, crece un 137%. “Al ser un monto en negro, el Fondo de Incentivo no impacta en variables muy sensibles como antigüedad y zona desfavorable; tampoco se aplican sobre él los descuentos de ley para financiar la Caja de Jubilaciones y nuestras obras sociales”, dicen desde Agmer. El aumento sobre un adicional que se paga en negro derivará en que el jubilado deje de percibir, de hecho, el 82%, y perciba apenas el 77% de lo que cobra un activo, con pérdidas de entre el 4% y el 4,81% en el caso de un maestro de jornada simple o un secretario de nivel medio. En el caso de un maestro de grado jubilado de escuela de jornada completa, la pérdida será del 8,26% sobre su salario; para un profesor de nivel medio con 36 horas jubilado, la pérdida será del 7,24%. La persistencia de ese adicional en negro es lo que dificulta el acuerdo entre los docentes y el Gobierno. Mañana, a las 9, el Ejecutivo deberá presentar una quinta oferta docente, y mañana mismo, después de mediodía, los gremios deberán responder si la aceptan o la rechazan.




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